Los viajes del maíz
Una historia diferente ocurrió en otras partes del mundo, cuando el maíz antillano se dispersó desde Sevilla por el Mediterráneo (1500-1520
La nevera y la pérdida de la memoria culinaria
Poco a poco, el progreso alimentario de la modernización hizo que nuestra memoria culinaria arrinconara aquellas ingeniosas formas de observación y conservación de lo natural. Así, se nos quedó atrás la costumbre de no quitar el ojo de los frutos en su ciclo de cultivo, fecundación y cosecha, algo que nos servía para marcar las fases lunares o percibir el paso del tiempo y las estaciones del año.